El Descontento

Una historia de soledad, ansiedad y la lucha por mantener la chispa vital en la alienación moderna.La presentadora del pódcast Arsénico Caviar y ganadora del Ondas, debuta con una afilada novela sobre una mujer harta del trabajo.na bomba de relojería: una novela sobre el trabajo todo lo demásque se lee de una sentada, pero se queda contigo mucho tiempo. Inteligente, divertidísima, sí, incluso sobre todocuando te reconoces en ella.LENA MEDEListurí, tripas y corazón. Beatriz, como quien no quiere la cosa, hace fácil lo difícil: El descontento habla del vacío que habita en cada uno de nosotros, del miedo a vivir, de la esperanza que sí late tras la máscara.ESÚS TERRÉSa novela de Serrano consigue leerse de manera generacional. Es difícil no sentir empatía con un personaje que transita entre la soledad y la decepción y que no se atreve a escapar de la escena tétrica en la que ha convertido su existencia. Tan real que duele.ENDAacía tiempo que no leía una primera novela tan divertida, ácida, corrosiva y en el fondo tan amarga como El descontento, de Beatriz Serrano.L CULTURALl humor ahorma a la protagonista de la novela, que se ríe de sí misma y de la holgazanería intelectual de cualquiera que cacaree frente a ella una frase hecha. Finta, con carcajadas, los tentáculos del pesimismo.L PAÍSEl descontento es la historia de Marisa, una mujer en la treintena que vive anestesiada mediante orfidales y vídeos de Youtube para soportar las rutinas y pesares de su día a día en una agencia de publicidad. Tan solo acude presencialmente a la oficina para ahorrar dinero en aire acondicionado durante el sofocante agosto madrileño. Marisa odia el trabajo. Sin embargo, no puede dejarlo: le gustan demasiado las cosas bonitas.La semana previa a un team building organizado por su empresa, la ansiedad de Marisa se dispara compartir un fin de semana entero con sus compañeros le resulta insoportable y e